Congresista Julca asegura que pronto darán sus frutos
Como se recuerda, el Parlamentario Ancashino Modesto Julca Jara fue el único que denunció ante el Consejo Nacional de la Magistratura, Procuraduría Anticorrupción, Comisión de Fiscalización del Congreso, Comisión de Alto Nivel Anticorrupción – CAN, Ministerio de Justicia, entre otros, los inexplicables cambios de los Fiscales Anticorrupción del Santa, que demostraron interés por investigar el caso emblemático “La Centralita”, fueron cesados por el Fiscal de la Nación, Antonio Peláez Bardales.
Asimismo, el legislador, en cumplimiento con su función Fiscalizadora y atendiendo las denuncias de la sociedad civil ancashina, permanentemente ha venido solicitando se investigue casos como: sobrevaloraciones en adquisiciones y obras públicas, así como irregularidades en la gestión del Gobierno Regional de Áncash, Gobiernos Locales, etc.
En merito a ello, la Comisión Permanente de Procesos Disciplinarios del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM), mediante Informe Nº 102-2013-CPD-CNM abrió investigación preliminar contra el Fiscal de la Nación Dr. José Antonio Peláez Bardales
Recordó el Parlamentario que mediante Oficio N° 671-2013/DMJJ-CR de fecha 14 de enero de 2013, solicitó también al Presidente de la Comisión de Fiscalización y Contraloría del Congreso, invite al Fiscal de la Nación para que explique a la representación nacional sobre los ceses de los fiscales antes mencionados e informe sobre la situación de la denuncias de corrupción que se tramitan en los distritos judiciales de Áncash y del Santa.
La verdad se abre paso respecto a la injusta sanción que se impuso a los fiscales que investigan la corrupción en Ancash. La investigación del periodista Ricardo Uceda, publicado en el Diario La República y ampliado en el programa “La Hora N”, detallan la forma en cómo se maquinó y cómo se viene concertando para separar a los Fiscales honestos.
Precisó que su trabajo y lucha permanente para investigar los casos de corrupción denunciados, que pese haberle costado muchos sinsabores van rindiendo sus frutos.
