Recién se acuerda de trabajar en equipo con sus regidores.
Luego de haber permanecido más de dos meses prófugo de la justicia por tener sobre él una orden de detención por haber cometido según denuncia de la fiscalía anticorrupción los delitos de peculado y malversación de fondos contra el estado (municipalidad), ayer pasado el medio día apareció con resolución en mano la autoridad edil de Pomabamba Juan Ponte Carranza, y retomó sus funciones de alcalde, en medio de los aplausos de sus trabadores.
Según refirió, la justicia le hizo eso, justicia y en base a su habeas corpus presentado en el juzgado de Huara, logró que cambien la orden de detención por comparecencia al haberse determinado dicha decisión de detención sin fundamento legal, debido a que la motivación no se ajusta a la verdad.
Juan Ponte Carranza, luego de haber asumido su cargo de alcalde dijo, ser totalmente inocente a las denuncias que le apertura la fiscalía anticorrupción y que su persona jamás cobró un solo centavo y menos cheques a nombre de trabajadores fantasmas, porque él no sabía cómo sus funcionarios de confianza manejaban o no esos pagos, por lo tanto no es su responsabilidad si esas denuncias son ciertas.
Sin embargo, la fiscalía determinó denunciarlo en el caso, siendo inocente, ordenando en forma excesivamente su orden de detención judicial, pero gracias al trabajo realizado por sus abogados mediante un habeas corpus obtuvo su libertad de inocencia.
En su alocución dijo “Soy inocente, si realmente la denuncia de la fiscalía anticorrupción ha encontrado irregularidades en mi gestión que castigue a los responsables, ahora vamos a trabajar haciendo más obras para Pomabamba y si los regidores quieren seguir trabajando con nosotros adelante que lo hagan y fiscalicen nuestro trabajo, porque si estamos cometiendo alguna irregularidad tienen todo el derecho a denunciarnos” dijo el tremendo alcalde libre de prisión.
