En un operativo sorpresivo realizado por la Fiscalía de Prevención del Delito de Áncash, en colaboración con OSINERGMIN y la Municipalidad Provincial de Huaylas, se clausuró un grifo ubicado en la ciudad de Caraz debido a la falta del registro obligatorio de hidrocarburos ante la entidad supervisora.
Este hecho evidencia una conducta reiterada de desacato a las sanciones impuestas por OSINERGMIN, lo que podría configurar el delito de peligro común, poniendo en riesgo la seguridad de la comunidad.
El operativo, llevado a cabo el pasado fin de semana, tuvo como objetivo garantizar que los establecimientos comerciales cumplieran con las normativas vigentes para la venta de combustibles. En el caso de este grifo, se detectó que operaba sin el debido registro ante OSINERGMIN, un requisito esencial para garantizar la legalidad y la seguridad en la distribución de combustibles.

Durante la intervención, la Fiscalía destacó la gravedad del incumplimiento, que no solo afecta el orden legal, sino que también pone en peligro la integridad de la población al no contar con las medidas de seguridad que garantizan el manejo adecuado de los hidrocarburos. La Municipalidad Provincial de Huaylas, a través de su personal, también participó activamente en el operativo, brindando apoyo a la Fiscalía y contribuyendo a la protección de la comunidad.

El caso de este grifo clausurado se suma a una serie de operativos preventivos que la Fiscalía de Prevención del Delito viene ejecutando en toda la región de Áncash para proteger la seguridad e integridad de la población. De acuerdo con los informes, en lo que va del año, se han llevado a cabo intervenciones en diversos puntos de la región con el fin de erradicar prácticas ilegales y garantizar que los establecimientos comerciales operen dentro de los marcos legales establecidos.