Mientras cientos de pacientes aguardan atención médica en instalaciones improvisadas, el fantasma de la obra abandonada del CISEA Huarupampa se alza como monumento a la incompetencia administrativa. El Gobierno Regional de Áncash, con amplia cobertura de cámaras, ha anunciado el tercer intento de culminación de un proyecto que ya gastó millones de soles sin resultado alguno.
No quieren recuperar el dinero

«Sesenta días», promete ahora la administración regional mientras visitan las instalaciones junto a los representantes de T&C Tecnología y Construcción, la nueva empresa que construirá la obra. Curiosamente, nadie menciona los 9 millones (casi 30% de los presupuestado en total inicialmente) ya pagados al anterior contratista por un avance físico de apenas 13%, ni explica por qué la carta fianza -garantía elemental para proteger los recursos públicos- permanece sin ser ejecutados ¿Acaso los funcionarios protegen a la empresa que abandonó la obra?
Accidentada obra
La historia se repite. El 2024 canceló el contrato tras el abandono de la empresa, en noviembre se anunció otro, y ahora en marzo aparece un tercer salvador de la obra. Mientras tanto, el dinero del Estado ya fue cobrado generosamente. Ahora son S/ 3 millones adicionales que se suman al presupuesto de un proyecto que parece diseñado para interrumpirse cada cierto tiempo, alimentando las arcas de los malos empresarios.
Cero Fiscalización

Fue la vicegobernadora Angelly Epifanía y el gerente general Marco La Rosa quienes posaron sonrientes, como si el gasto desmedido de recursos no mereciera explicación alguna. El consejero Walter Medrano proclama que «regresaremos a verificar los avances porque queremos acciones más que palabras», sin mencionar que se lleva años el mismo discurso y recordando que solo ha sido la prensa quienes han fiscalizado estas obras mas no los consejeros regionales.