Los Policías Municipales de Huaraz, quienes están a cargo de hacer cumplir la ley y mantener la tranquilidad en las calles, se encuentran en medio de un conflicto delicado. Las denuncias públicas en su contra, realizadas por los vendedores informales, son preocupantes. Los comerciantes alegan que se ven obligados a pagar sumas considerables de dinero para mantener sus negocios en las calles, lo que, según ellos, les permite operar sin restricciones y evadir las regulaciones municipales.
En respuesta a estas acusaciones, más de 30 Policías Municipales han decidido tomar una posición firme. Exigen que el Gerente de Servicios Públicos, Fidel Morales, intervenga y defienda los derechos y la dignidad de los comerciantes informales ilegales. Argumentan que su papel es garantizar el cumplimiento de las leyes y regulaciones locales, y no están involucrados en prácticas corruptas.
Por su parte, los integrantes del cuerpo policial rechazan contundentemente las acusaciones de soborno y afirman que están comprometidos con el cumplimiento de sus deberes de manera justa y transparente.
