Era el lugar dónde se vendían aparentemente productos robados a terceras personas, como celulares.
El subgerente de comercialización de la Municipalidad de Huaraz, José Bravo Valdez, informó que en aplicación de la ordenanza municipal 019-2019 se procedió a clausurar en forma definitiva el local denominado la “Cachina”, ubicado a pocos metros del puente Quillcay.
“Se determinó el cierre definitivo sin derecho a reclamo por no solo haber incumplido las normas de sanidad, sino las certificaciones para su funcionamiento.
Pero lo más delicado, es que, en forma permanente se reportaba de la venta de equipos de celulares de dudosa procedencia, fue la policía nacional quien realizó el seguimiento del caso, luego que los primeros meses se hizo más de dos intervenciones, incautando productos robados.
Sin embargo, insistían con ese tipo de venta prohibida, antes que esto se termine en un hecho delincuencial se determinó cerrarlos. Tiene el derecho de hacer todos los trámites de ley para apelar la decisión, pero saben que han cometido faltas que son irreversibles a la ley” dijo Bravo Valdez.
