Como todos los días, familiares daban el último adiós a sus familiares, pero sin derecho a abrazarlo.
Como todos los días, la unidad de cuidados intensivos, fue escenario de la salida de más personas víctimas de la covid-19 y cepa brasilera, con destino al cementerio de Huaraz, porque no tenían derecho a los familiares de despedirse de su ser querido.
Solo tenían derecho de verlos desde la distancia por exigencia del protocolo de bioseguridad a pesar de la insistencia de la familia de llevarlo por casa para su despedida, no fue aceptado el pedido.