En forma sorpresiva, la prensa logró ubicar a un grupo de trabajadores del botadero Carhuashirca en las afueras del local municipal, lo que llamó la atención fue verlos por fin con un uniforme de trabajo que les permita ser contagiados por el Covid-19
Lucían, botas de plástico, mascarilla, sombrero, mameluco, guantes y
pequeñas botellitas del alcohol, derechos que no los tenían permanentemente, lo
que llamó la atención es que ningunos quiso hablar con la prensa, aparentemente
están prohibido hacerlo.
