Pilar Anaya, quien anteriormente presidió el Fedip Huaraz, ha expresado su descontento por la gestión del alcalde de Huaraz. Su crítica se centra en la decisión de devolver 10 millones de soles al gobierno central, a pesar de que las calles de la ciudad necesitan con urgencia ser reconstruidas.
Anaya considera que la administración municipal no ha asumido la responsabilidad de realizar este trabajo, lo que podría haber evitado que las calles, como la calle Luzuriaga, se conviertan en zonas propensas a inundaciones durante eventos como el fenómeno del niño.
La falta de inversión del dinero revertido ha generado insatisfacción entre la población y una creciente preocupación por la infraestructura de la ciudad.
