La señora Elizabet Figueroa, vecina de Huaraz, ha denunciado públicamente el abuso del propietario de una enorme edificación cuya construcción fue inicialmente paralizada por la Municipalidad de Huaraz. Figueroa, cuya vivienda colinda con la obra, señaló que el propietario había prometido no dañar las casas vecinas, pero no cumplió su compromiso.
La vecina explicó que, a pesar de haber denunciado el caso tanto a la Municipalidad como a la Fiscalía, el propietario, respaldado por su poder económico, logró obtener una autorización para reanudar los trabajos. Con esta autorización, la construcción avanzó rápidamente, convirtiéndose en uno de los edificios más grandes de la ciudad, lo que representa una amenaza directa para la integridad de su hogar.
«Exijo garantías para mi propiedad, no podemos vivir en tranquilidad con el bullicio que genera su construcción», expresó Figueroa, quien pidió a las autoridades que tomen acciones para asegurar la protección de las viviendas cercanas.