Según el jefe de la unidad de prevención de transmisión sexual, Edwin Robles, se han identificado entre 4 y 5 casos sospechosos, principalmente en la población clave de trabajadores sexuales.
Los pacientes presentan lesiones características de la enfermedad, como vesículas y ampollas, y están siendo evaluados exhaustivamente para confirmar o descartar el diagnóstico. Robles aseguró que no se han reportado casos en menores de edad.
Ante esta situación, las autoridades sanitarias han activado los protocolos de vigilancia y control para evitar la propagación de la enfermedad. Equipos especializados están realizando un seguimiento cercano a los casos sospechosos y a sus contactos cercanos.
«Es importante destacar que estamos tomando todas las medidas necesarias para garantizar la salud de la población», afirmó Robles.