El crimen ocurrió durante la madrugada del 27 de noviembre de 2022 en la ciudad de Caraz, provincia de Huaylas, región Áncash. Según la investigación realizada por la fiscal adjunta provincial Yessica Karina Ríos Vargas, el entonces efectivo policial, quien se encontraba de franco, llegó ebrio a la casa de su suegra para, supuestamente, dormir con su hijo de 7 años.
Tras discutir con su esposa por no contestarle el teléfono, el policía sacó su arma de fuego y disparó contra ella y su suegra, en presencia de su menor hijo. Las víctimas fueron trasladadas de inmediato al hospital, donde lograron salvar sus vidas.
El Primer Juzgado Penal Colegiado Conformado Supraprovincial – en Violencia contra las Mujeres y los Integrantes del Grupo Familiar de la Corte Superior de Justicia de Áncash condenó al imputado a 35 años de pena privativa de libertad efectiva y al pago de una reparación civil. A la fecha, el sentenciado se encuentra recluido en el Centro Penitenciario Víctor Pérez Liendo de Huaraz, donde deberá cumplir su condena.