Conductores en estado de ebriedad se salvan de la cárcel porque sus casos no llegan al Poder Judicial, solo a la fiscalía donde salen libres por terminación anticipada.
El presidente del Poder Judicial de Áncash advirtió sobre la gravedad de los delitos de peligro común, especialmente aquellos cometidos por conductores en estado de ebriedad.
Señaló que, pese a tratarse de una falta grave y concurrente, en muchos casos los infractores no llegan a ser juzgados por el Poder Judicial debido a que optan por una terminación anticipada en la Fiscalía.
“Estos acuerdos permiten que no se genere antecedente penal, lo cual libera a personas que deberían recibir sanciones efectivas de hasta cuatro años de prisión”, declaró.
El magistrado también cuestionó el seguimiento de las sanciones administrativas asociadas, como la suspensión de la licencia de conducir. “¿Se está cumpliendo realmente con estas sanciones? ¿Quién las verifica?”, cuestionó, haciendo un llamado a reforzar los mecanismos de control y justicia en estos casos que, según advirtió, deben ser tratados con mayor rigurosidad para proteger a la sociedad.