Un acto de total irresponsabilidad ha generado indignación entre los vecinos de Huaraz. Desde el cuarto piso de un moderno edificio, donde aparentemente funciona una institución educativa privada, se vierten aguas directamente a la vía pública en plena luz del día.
Este hecho, ocurrido en la intersección del jirón Julián de Morales con la avenida Luzuriaga, impide el libre tránsito de los peatones, quienes deben sortear el agua para continuar su camino. Vecinos y transeúntes han expresado su indignación, exigiendo a las autoridades municipales que tomen cartas en el asunto y sancionen a los responsables de este atentado contra la limpieza y el orden público.
Las imágenes registradas por Huaraz Noticias evidencian la falta de respeto por la ciudad y el peligro que representa esta acción para los peatones