Frank Martínez, un huaracino de 35 años, padre de dos niñas, quedó ciego tras consumir licor adulterado.
El joven, quien se desempeñaba como administrador, adquirió una botella de pisco en una tienda ubicada en el Jr. 27 de Noviembre (ex Tarapacá), cerca al Paramonga. La bebida contenía metanol, una sustancia altamente tóxica que puede causar ceguera, convulsiones, coma e incluso la muerte.
Martínez fue internado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Víctor Ramos de Huaraz, donde permaneció en coma durante más de dos meses. Tras despertar, se enteró de que había perdido la vista.
El joven intentó denunciar a los responsables, pero su denuncia fue desestimada porque no podía reconocer al vendedor.
La historia de Frank Martínez ha conmovido a la población huaracina. En redes sociales, se ha difundido una fotografía donde se ve al joven junto a sus hijas, quienes lo guían para que pueda caminar apoyado de un bastón.
Sin embargo, Martínez también ha enfrentado momentos difíciles. Según trascendió, algunas personas cercanas le estarían dando la espalda.
El caso de Frank Martínez es un recordatorio de la importancia de consumir bebidas alcohólicas solo en lugares autorizados.