Los robos se han incrementado en las cuadras 9, 10 y 11 de la avenida Luzuriaga, un sector que quedó en total abandono tras la paralización de las obras a cargo del Consorcio Cruz Blanca, en aparente complicidad con la Municipalidad de Huaraz.
La ejecución de la obra fue suspendida hasta abril, una vez finalizada la temporada de lluvias, dejando la zona cubierta con plásticos negros, sin tránsito vehicular y con paso peatonal reducido a un camino improvisado entre lodo, piedras y escombros.
A partir de las 7 de la noche, esta área se convierte en un punto altamente peligroso debido a la falta de presencia policial, la ausencia de patrullas integradas y la indiferencia del consorcio, que no ha garantizado medidas de seguridad en el lugar. Como resultado, delincuentes aprovechan la oscuridad y el abandono para atacar y asaltar a transeúntes sin que nadie pueda auxiliarlos.