Luego de un plantón de más de 24 horas en las inmediaciones de la Municipalidad Provincial de Pomabamba, los integrantes de las Rondas Campesinas de Alpamayo y Cotocancha lograron su objetivo: la renuncia de varios funcionarios municipales. Los ronderos, más de 200 en total, exigían la remoción de estos servidores públicos a quienes acusaban de incumplir con las promesas de obras para sus comunidades.
La presión ejercida por los ronderos resultó efectiva, y al menos dos gerentes municipales presentaron públicamente su renuncia de manera irrevocable. Sin embargo, la situación se tornó más compleja cuando los funcionarios dimitientes acusaron a los dirigentes ronderos de tener intereses económicos detrás de sus demandas.
Según los exfuncionarios, algunos dirigentes habrían solicitado favores a cambio de no continuar con las protestas, incluso amenazando con movilizar a toda la comunidad si no se atendían sus pedidos.