La uta, una enfermedad cutánea que se creía erradicada, ha vuelto a azotar la provincia de Pallasca, región Ancash. Ya se han confirmado 30 casos, 20 en niños y 10 en adultos, en los distritos de Bolognesi, Cabana y Tauca.
La población vulnerable son los caseríos y centros poblados con climas cálidos y húmedos, ideales para el desarrollo del mosquito Lutzomyia, transmisor de la uta. Algunos pacientes que acudieron al centro de salud de Pallasca no han podido recibir tratamiento por la falta de ampollas y medicinas.
Se teme que el número de casos aumente, ya que muchos afectados no acuden a los centros de salud por desconocimiento o por preferir la automedicación, lo que agrava la enfermedad.
