Actualmente de los 27 Guardaparques 3 son mujeres, quienes contribuyen en la conservación de las 340,000 hectáreas.
Ada Villa, es natural de la ciudad de Lima, es bachiller en ingeniera forestal y labora hace tres años en la Jefatura del Parque Nacional Huascarán como Guardaparqueo ficial; una de las tres mujeres que desempeña esta función.
Para desarrollar este trabajo participo de los programas de Guardaparques voluntarios en la Reserva Nacional Pampa Galeras y en la Reserva Paisajística Nor Yauyos Cocha. Durante su tiempo de voluntaria fue alimentando su amor por la naturaleza y estar cerca a los nevados, aprendió sobre la labor de monitoreo de flora y fauna, seguimiento de posibles infractores; reconoce que las salidas de campo son primordiales, base fundamental de una Guardaparque.
Ada debe trabajar a tiempo completo, incluso cuando la tarea no es atender a los viajeros, sino enfrentar sin armamento a los cazadores de venados o incluso a mineros ilegales.
Su trabajo no solo consiste en custodiar que no se cometan delitos dentro de las áreas protegidas, sino también apoyar y promover actividades sociales, convirtiéndose en un nexo importante entre las comunidades locales y el Estado.
“El trabajo de guardaparque es arriesgado de alguna manera, pero lo que se recibe a cambio no tiene precio, y con esto no me refiero a la remuneración sino al solo hecho de estar cerca a los nevados, los paisajes de ensueño que existen, este es el trabajo que siempre quise y espero poder seguir contribuyendo en el Parque por muchos años más”, nos comenta.
