En el marco del primer aniversario de su gestión como Gobernador Regional de Ancash, Koki Noriega presentó un informe detallado de su labor como máxima autoridad. Durante el discurso, Noriega sorprendió al dirigir unas disculpas personales a su familia, de la cual se ha alejado desde que asumió el cargo. Reconoció que esta decisión fue difícil, pero enfatizó la importancia de su papel como representante institucional.
El gobernador expresó su deseo de que su familia comprenda la necesidad de su compromiso con la región, colocando la responsabilidad pública por encima de las relaciones personales. Asimismo, Noriega solicitó comprensión a los miembros de su movimiento político, El Agua, instándolos a entender que la política debe ser un servicio desinteresado para el bienestar de la región, y no una oportunidad para lucrar.