Para evitar el decomiso de sus productos de pan llevar que realizan las autoridades ediles, se defienden en medio de patadas y puñetes.
El fin de semana, los operativos en la ex parada Quillcay donde el número de vendedores ambulantes y comerciantes informales que toman las calles y verdad de dicha zona intangible, sigue siendo no solo una zona caliente para los contagios de covid-19, sino además es un sector invadido donde el equipo de la policía municipal y la subgerencia de comercialización todos los días buscan poner orden, pero en medio de agresiones con patadas, puñetes, piedras y hasta arma blancas aparecen en plena intervención.
Ni la acción de la fuerza y poder de autoridad de la Policía Nacional pueden en muchos momentos controlar la violencia que el fin de semana se terminó convirtiendo la zona ex parada Quillcay Las imágenes