Pese a contar con expertos en diversas áreas, su participación en la defensa de la ciudad es prácticamente nula. Cuando la población los convoca para sumarse a causas urgentes, simplemente no responden.
Mientras tanto, el Frente de Defensa de los Intereses de Huaraz (Fedip) atraviesa una crisis de legitimidad, sin liderazgo claro ni acciones concretas en beneficio de la ciudadanía. Esta falta de representación deja a la población a merced de las decisiones de las autoridades, muchas veces cuestionadas por corrupción o ineficiencia.
Es urgente que la sociedad civil se reorganice y exija mayor compromiso de los colegios profesionales, que deberían ser aliados del pueblo y no actores pasivos que solo buscan aprovecharse de los recursos del gobierno regional y municipal.