Tan solo 48 horas después de la movilización ciudadana, que exigía la suspensión de las autorizaciones de servicio de las líneas involucradas, se registró un nuevo enfrentamiento, esta vez entre la línea 2 y la línea 8.
Las imágenes difundidas en redes sociales muestran escenas de violencia, con conductores y cobradores protagonizando agresiones verbales y físicas.
Los pobladores de Huanchac se encuentran sumamente preocupados por esta situación, ya que la inseguridad se ha vuelto una constante en la zona. Los enfrentamientos entre transportistas generan un clima de tensión y ponen en riesgo la integridad física de los usuarios.
«Estamos hartos de esta situación», expresó un vecino de Huanchac. «Hemos pedido al municipio que tome cartas en el asunto, pero hasta el momento no hemos obtenido una respuesta satisfactoria. Necesitamos que se ponga fin a esta violencia y que se garantice un servicio de transporte seguro y confiable».