Ya descansa, al lado de Dios, desde donde seguirá velando por la justicia de Huaraz y Ancash.
Luego de una larga lucha contra una enfermedad que lo llevó a estar internado muchos meses en el hospital Rebagliati, de donde salió airoso y volvió a incorporarse a lo que era la razón de su vida, el periodismo desde la ciudad de Lima, sin olvidar su querido Huaraz.
Lamentablemente, el mal que sufría no le permitió seguir siendo guerrero al frente del periodismo y terminó de arrancarle la vida, y hoy descansa en paz al lado de Dios, dejando un gran vacío en su familia, amigos y a la población en general que no conocía, quería y posiblemente lo odiaba.
Pero nadie podrá negarle que, pese a su pequeño tamaño, tenía grandes cualidades en el periodismo los que los volcó en los medios de comunicación radial, televisiva y escrita, y será esos recuerdos que quedarán impregnados por siempre en el presente.
Quien ha conocido a Guido Duran no dejará de reconocer que sus reuniones, discusiones de la coyuntura local regional y nacional que se vivía en el momento eran escenarios de debates, polémicas, cuestionamientos, hasta peleas que al final terminaban con un cafecito o un traguito.
En determinados momentos dejó su pluma en Huaraz Noticias, además que siempre gozamos de su amistad, por esa razón jamás olvidaremos sus temas de análisis, a su estilo, en los momentos de luchas en favor de Huaraz o las campañas políticas.
Pero lo que quedará por siempre en muchos de sus amigos y conocidos, serán sus discusiones políticas, cuando hablaba de su paso por Colombia, su admiración por Escobar, las FARC, en fin, muchas cosas más.
Amigo Guido, siempre te recordaremos con esa sonrisa y las motivaciones de enfrentar los problemas con alegría y frialdad, sin agachar la cabeza a nada, ni nadie. Hasta siempre Amigo.
