Desde hace más de 72 horas, la oficina de la Defensoría del Pueblo en Áncash se encuentra sin representante titular, tras la renuncia sorpresiva de la abogada Doris Tamara Cadillo, quien hasta hace pocos días ocupaba el cargo.
La noticia ha generado sorpresa tanto entre las autoridades como en la ciudadanía. Fuentes cercanas a la institución revelaron que la decisión habría estado motivada por la falta de principio de autoridad al interior de la sede, ya que —según trascendidos— parte del personal no acataba sus directrices, dificultando el normal funcionamiento del organismo en la región.
Consultada por Huaraz Noticias, la actual encargada de la Defensoría del Pueblo negó que existieran conflictos internos entre el personal, asegurando que “el trabajo siempre se desarrolló en equipo”.
Hasta el momento no se ha designado oficialmente a un nuevo titular para la Defensoría en Áncash, lo que mantiene en expectativa a los usuarios de esta institución clave para la defensa de los derechos ciudadanos