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Álvarez “sin salida”

La Procuraduría ha pedido su detención preventiva por ocho meses por los delitos de corrupción.

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La Procuraduría ha pedido su detención preventiva por ocho meses por los delitos de corrupción.


Las entregó un testigo clave que se sometió a la colaboración eficaz. Por esta y otras razones, es poco probable que Álvarez Aguilar pueda salir en libertad en los 15 días en los que será sometido a una investigación preliminar. Sin duda, tiene mucho más por responder.


César Álvarez está preso preventivamente por solo 15 días en la Dirección de Investigación Criminal (DIRINCRI). Es acusado por la presunta comisión de los delitos de homicidio y asociación ilícita para delinquir. Pero el presidente regional de Áncash no solo deberá responder ante la justicia por los crímenes mencionados, sino por las decenas de casos de corrupción por los que ha sido acusado.


Especialmente por el de ‘La Centralita’, el lugar en donde supuestamente se fabricó no solo el asesinato del exconsejero regional Ezequiel Nolasco, sino donde se gestaron también noticias falsas, arreglos bajo la mesa, sobornos, entre otros delitos, narrados por un colaborador eficaz, que a continuación contaremos. Todo lo que se hacía en ese lugar era con el fin de garantizar la permanencia de Álvarez en el poder.


En la cuadra 6 de la calle Los Pinos, urbanización La Caleta, distrito de Chimbote, en la provincia del Santa, en Áncash, estaba ubicado un centro de campaña y negociado dirigido por el hoy encarcelado presidente regional ancashino, César Álvarez Aguilar. En la denominada ‘La Centralita’ no se interceptaba telefónicamente a los opositores políticos del titular de la región, como se ha sostenido en algunos medios en los últimos días, sino que se editaban los audios de las conversaciones que llegaban a las manos de Álvarez.


La historia a continuación está en manos de la Fiscalía Provincial Anticorrupción del Santa, a cargo del fiscal Laureano Añanca Chumbe, quien recoge actualmente el testimonio de informantes protegidos. César Álvarez reclutó a dos o tres trabajadores del proyecto Chinecas para que sean operadores en ‘La Centralita’. Los empleados fueron capacitados en el arte de la producción audiovisual y ediciones de audio.


Una vez instalados y preparados, en la cuadra 6 de Los Pinos -en donde también reside el congresista Heriberto Benítez- los reclutados empezaron a trabajar para la organización criminal encabezada por Álvarez, pero seguían recibiendo un sueldo mensual como trabajadores del proyecto Chinecas. A ese acto doloso se le denomina peculado, cuya pena de cárcel es de ocho años.


A ‘La Centralita’ llegaban discos compactos (CD) con conversaciones telefónicas que habían sostenido opositores políticos de Álvarez. Según los testigos, estos habrían sido enviados por el empresario Rodolfo Orellana, quien enfrenta procesos judiciales por lavado de activos.


Si no caían en las manos del presidente regional, eran recibidos por su asesor de imagen, Jorge Burgos Guanilo, sobre quien también pesa la orden de captura preventiva (de 15 días) por el asesinato de Nolasco.


Los CD eran descargados en las computadoras instaladas en ‘La Centralita’ y subtitulados por uno de los reclutados. El funcionamiento era el siguiente: uno se encargaba de transcribir las conversaciones, otro les colocaba el nombre a los protagonistas del diálogo, mientras el siguiente colocaba las fotos de los protagonistas y una foto central con el tema que estaban tratando.


Cuando el trabajo estaba terminado, se llamaba telefónicamente a los denominados ‘periodistas comando’, que no son más que un puñado de reporteros al servicio del régimen ancashino. A ellos se les hacía llegar un CD con los audios listos para ser transmitidos en algunos noticieros locales. Uno de ellos, por ejemplo, es el del canal 31, propiedad del actual congresista Víctor Crisólogo.


En ‘La Centralita’ también se editaban los videos de las presentaciones de obras de César Álvarez y las entrevistas que ofrecía el congresista Heriberto Benítez. Todo el material de imagen se trabajaba en ese lugar para ser enviado a los canales afines al gobierno regional.


Ya hemos dicho que en ‘La Centralita’ se preparaba el material para los noticieros (comprados) afines a César Álvarez. La información a la que este diario tuvo acceso en exclusiva es que en el mentado local también se fabricaban noticias y falsas denuncias.


Una de ellas, de la que existe un video, es de cuando el propio presidente regional de Áncash dirige la puesta en escena de una supuesta denuncia de violación en contra de uno de sus opositores.


En el material se visualiza a una mujer frente a una cámara, preguntando “¿Cómo se llama el señor al que tengo que denunciar?”, y detrás de la toma se oye la original e incontrastable voz carrasposa de Álvarez, contestando: “Tú di el cargo no más, mamita”. Luego del tres, dos, uno, la señorita en cuestión empieza a denunciar por abuso sexual a un funcionario opositor de Álvarez cuyo nombre se mantiene en reserva de la Fiscalía. Al mismo estilo de la peor época del régimen fujimontesinista, en Áncash se vivía un pequeño gran infierno.


El testimonio protegido, que está bajo la tutela de la Fiscalía Anticorrupción del Santa, también narra cómo es que ‘La Centralita’ funcionaba como centro de almacenamiento de un inmenso material de campaña electoral a favor tanto de César Álvarez como del congresista Heriberto Benítez.


Al lugar han llegado hasta cuatro camiones tipo cisterna repletos de material de campaña. Uno de los asalariados del proyecto Chinecas, que operaba en ‘La Centralita’, se encargaba de recibir el material. Se trataba de polos, gorros, pancartas, chalecos, etc., que serían repartidos en todos los mítines que el presidente regional dirigiría como parte de su campaña de reelección de 2010. La pregunta que la Fiscalía debe formular es: ¿de dónde proviene el dinero para la megacampaña?


Lo narrado anteriormente no es más que la punta del iceberg de pruebas contundentes que están en manos de la Fiscalía Anticorrupción del Santa y por las que tendrá que responder el hoy encarcelado presidente regional de Áncash, César Álvarez Aguilar.


La detención en la sede de la Dirección de Investigación Criminal (DIRINCRI) es por tan solo 15 días, luego de los cuales se decidirá si el acusado continúa el proceso en prisión o si sale en libertad bajo orden de comparecencia.


La Procuraduría Anticorrupción solicitó la prisión preventiva (por ocho meses) contra Álvarez. Pero la Fiscalía en El Santa no la aceptó y solo ordenó el impedimento de salida del país. Además, hace cuatro semanas la entidad a cargo del procurador Christian Salas realizó el pedido de ampliación del proceso de corrupción contra el presidente regional ancashino, pero la Fiscalía aún no responde. El acusado de ser el autor del crimen de Ezequiel Nolasco y varios delitos de corrupción puede salir libre en 15 días o permanecer en prisión solo si la Fiscalía en Áncash así lo decide. La prevención, entonces, queda en sus manos.


 

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