Extraño demasiado no solo el actuar de la fiscalía Anticorrupción, sino el Poder Judicial de Ancash, el fin de semana cuando en medio de serios cuestionamientos de la población y de un mínimo sector de la prensa, la actitud mostrado por los dos entes de justicia para el caso del ingeniero civil y perito adjunto a la fiscalía de lucha contra la corrupción de funcionarios, Víctor Otto Cabello a quien se le encontró coimeando a un ex alcalde de Caraz con 2 mil soles, el juez sentenciará a 4 años y 4 meses de prisión, en un caso escandaloso que pintaba de cuerpo entero cómo los entes que deben luchar contra la corrupción, los corruptos son los que los integran, dijo Vértiz Urbina.
“Veía sorprendido cómo en primer lugar la fiscalía hizo todo lo posible para hacer Público el caso, y llegó a demorarse 2 días para solicitar la denuncia ante el juez con la ley de flagrancia, así como haber mostrado cierta resistencia ante los medios de comunicación donde oficialmente el caso se hizo público a las 48 horas de ocurrido el hecho, eso huele mal.
Pero lo más grave es lo ocurrido en el juzgado preparatoria, donde el doctor La Rosa Sánchez, está equivocado en su decisión, al haberle impuesto una sentencia por demás complaciente y antes de aplicar dicha sentencia, presentó al acusado con una serie de cualidades.
Como el manifestar que hizo ese acto porque su madre tiene cáncer, el es una persona honesta, huaracino, sin antecedentes, un hombre ejemplar, muy querido en Huaraz, buenas notas, etcccc, .
Nunca antes escuché que el juez que está para sancionar terminó de tirarle flores al acusado, al perito por cuyas manos pasaron las denuncias más escandalosas de proyectos y obras de inversión.
No entendemos al juez la Rosa, quien también dijo que el intervenido cometió el delito porque tenía problemas familiares y sentenció por humanidad ese tiempo, entonces el resto de ciudadanos que cometan delito igual que también le emitan una resolución humanista”, con este de decisiones no se avanza nada contra la corrupción, dijo Huaraz Noticias.
